viernes, 17 de junio de 2016

II CONCURSO DE RELATOS CORTOS: NARRACION NUM 9



Tumbado en la cama del hospital mira a través de la ventana. El día es gris y la lluvia golpea los cristales, igual que aquel día hace siete años atrás, cuando hastiado de todo lo que le rodeaba decidió investigar en los mundos virtuales. Sonríe para sí mismo, al recordarlo…

Al principio, recorriendo ese extraño mundo de pixeles, no le dio valor a las pequeñas cosas de las que era capaz de hacer. No solo podía andar y moverse, sino también volar e interactuar libremente con objetos y personas de todo tipo y condición. Pero todo ello, al igual que en su imaginación, no era real, sino una simple simulación por muy bien trabajada que estuviera. Fue a los pocos meses, cuando realmente empezó a establecer una relación con ciertas personas, que se dio cuenta de la libertad de la que disfrutaba. Podía ir a tomar un café con alguien, bailar en una discoteca e incluso algún lento con una hermosa chica. La facilidad de activar la voz y poder hablar sin necesidad de escribir, hacía que todo fuese mucho más real. Por fin era una persona normal y la vida le sonreía. Los días dejaron de ser grises y lluviosos.

Con el tiempo fue conociendo a un pequeño grupo de personas de distintas nacionalidades, con la que la intimidad llego a niveles insospechados para él. Podía llorar, reír, oír y disfrutar de la compañía, llevando las relaciones más allá de ese maravilloso mundo virtual. Aunque nunca fue muy dado a usar otros medios de comunicación, para él su segunda vida en ese mundo de pixeles era perfecta tal y como funcionaba. Él nunca les mintió, nunca fue su intención, siempre se mostró tal y como era, pero en esos siete años, tampoco nunca les conto su pequeño secreto. Pensaba que no necesitaban saberlo, que si lo descubrían le tratarían de forma diferente, aunque él no pudiese ver sus ojos sabría que lo mirarían con lastima y en sus voces podría oír la pena y la condescendencia que oía en el resto de personas que le rodeaban todos los días. No, eso no era necesario, la vida que le ofrecía Second Life era perfecta tal y como estaba, no deseaba que cambiase por nada del mundo.
Cierto es que no siempre había sido fácil, con los años las ganas de verse y estar juntos habían aumentado. Eran un pequeño grupo de 8 personas que habían congeniado, mismas aficiones mismos gustos, mismos sentido del humor. No entendían porque él nunca mostraba una foto suya real, tampoco porque no ponía cámara en las conferencias de Skype, y cada vez se hacía más difícil buscar una excusa creíble para las quedadas que se hacían en la realidad. Hasta ahora, siempre había esquivado el bache con éxito.

Pero hace apenas medio año la situación cambió radicalmente. De repente su pequeño secreto decidió por sí mismo que iba siendo hora de que le prestase atención, y los viajes, las pruebas, sus padres, sus hermanos, todo lo que le rodeaba, y sobre todo el horrible dolor, le impedía pasar el tiempo que deseaba con sus amigos y en su tan amada vida normal. Esa falta de dedicación a ese mundo virtual, hizo que las reclamaciones llegaran, ya no había excusas válidas para eludir las video conferencias, no entendían porque no mostraba fotos y porque se negaba tanto a verlos en persona. La frustración llego a tales niveles, que incluso llegaron a acusarlo de falso amigo y mentiroso. El dolor físico, ya no resultaba tan insoportable.
Decidió abandonar su mundo de fantasía, pensó que por un breve espacio de su vida, había podio probar la vida tal y como los demás la disfrutaban e incluso en secreto había llegado a enamorase. Por supuesto nunca se lo había dicho a ella, no podía causarle ese dolor, y aunque sabía que era correspondido, era mejor que ella fuese libre para vivir como deseaba. Se había resignado a abandonarlo todo aceptado que su tiempo ya había pasado. Poco a poco se fue apagando, y aquellos que le rodeaban pensaban que debido a las circunstancias de su estado, eran incapaces de imaginar, que por una vez lo tuvo todo, y que el dolor de perderlo era peor que lo en realidad sucedía.

Pero había algo con lo que él no contaba; detrás de todos esos reproches y esas acusaciones tan horribles, lo que de verdad existía era un sentimiento de amistad y amor puro. Aunque él había decidido abandonarlos a su suerte, ellos no estaban tan dispuestos a hacer lo mismo. Las llamadas, los mensajes, se sucedían por docenas todos los días, preguntado donde estaba, por qué no aparecía.

Hace un mes, después de interminables pruebas, y torturas varias, le comunicaron que obligatoriamente debía pasar por quirófano una vez más. Ya había perdido la cuenta de cuantas veces había sufrido ese proceso después del trágico accidente. Por supuesto no iban a devolverle su vida, pero si salía bien aliviaría el dolor, si salía mal, entonces…

Hace una semana, sumergido en una gran desesperación, decidió convocarlos a todos, pensó que si había un final, se merecían saberlo todo. Entre ellos estaba la mujer a la que amaba, a la que nunca se había atrevido a decir “te quiero”. Todos sentados en un hermoso bar que habían encontrado en uno de los múltiples mundos de Second Life, esperando ansiosamente una explicación, todos rodeándole y fijando sus miradas pixeladas en ese avatar de aspecto corriente, que por fin se convirtió en un humanos real, al desvelar la verdad

A la edad de tres años, sus padres habían tenido un accidente de coche, donde él tuvo la desgracia de quedar tetrapléjico para el resto de su vida. Desde entonces hasta hoy a sus 30, el único mundo que había conocido era su pequeña habitación y el hospital donde paso la mayor parte de su infancia. Pidió disculpas y no permitió que ninguno hablase. Comento lo de su operación y el motivo de esta, y las posibles consecuencias. Después simplemente se despidió, apagó ordenadores y teléfonos.

Dentro de unas horas vendrán para prepararlo y llevarlo a quirófano, afuera esta gris y llueve. Su madre está sentada al lado suyo mirando una revista. Por la forma en que pasa las hojas, sabe que está nerviosa. El resto de la familia ha bajado a la cafetería un momento. De repente suena la puerta, mira hacia está viendo como lentamente se abre y aparece su hermana con una gran sonrisa dibujada en la cara y detrás de ella una multitud de personas, creando un alboroto impropio de un hospital.

Reconoce todas y cada una de sus caras, no son pixeladas como las que está acostumbrado a ver, pero son tan bellas o más que ese conjunto de pixeles. Sus voces son iguales que las que lleva oyendo siete largos años y sus gestos son tan parecido a sus "aos", que sería imposible decir donde está la línea de lo virtual y donde la de lo real

Y entonces suena una voz por la de encima de todos, la voz más angelical y preciosa que nunca haya oído…” De verdad pensaste que íbamos a abandonarte, que no nos importabas, no vas pasar por esto sin nosotros, no vas a pasar por esto sin mi”… se acercó a la cama y lo besó.

El sol había salido fuera.

9 comentarios :

  1. Me encanta, no puedo describirlo de otra manera, para quien no ha vivido en el mundo de second life es difícil entender lo reales que pueden ser los sentimientos de amor y amistad que ahí dentro se forjan y lo que en muchos momentos buenos y no tan buenos de nuestras vidas es capaz de aportarnos esa realidad virtual y aunque el relato es breve considero que lo plasma perfectamente.

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  2. Ayyyyyy es hermosoooo!! Es muy cierto que todos esconden un secreto, desde los más superficiales para no mostrar un lado oscuro y hacer el mal; hasta los más profundos y dolorosos para no perder lo que llena un gran vacío en la realidad. Simplemente hermoso y bellamente escrito. Me fascina y se agradece :)
    xBRISEIDAx Resident

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  3. Excelente! Me encantó!!
    Y es un mensaje para los que presionan con el voice!: pueden estar arruinando el juego a algún mudito

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  4. Muy lindo! De una forma u otra muchos podemos reflejarnos en esta historia. Me encanto, excelente!!!! :)

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  5. Me ha encantado! Una preciosa Historia, totalmente Real!

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  6. Muy guapo;!! Eres una máquina!!! Muack

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  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  8. Chapó!...No esperaba menos de la escritora.Gracias por este gran relato.Con un gran mensaje y lleno de sentimiento que a mi en lo personal me ha llegado al alma y me ha emocionado .Espero que sigas creando historias tan buenas como esta.Solo decir gracias por dejarnos ver tu lado de escritora.Un Beso.

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